Bernal

Con el maravilloso monolito, considerado el tercero más grande del mundo, a sus espaldas, San Sebastián Bernal se convirtió en el primer Pueblo Mágico de Querétaro con su nombramiento en 2005.

La Peña de Bernal ha atraído a un creciente número de visitantes quienes ven en este gran coloso de piedra volcánica un lugar lleno de misticismo. Cada año, durante el fin de semana más cercano al equinoccio de primavera, miles de personas visitan Bernal y suben a las faldas de la Peña con la esperanza holística de “recargarse de energía”, atribuida a la antigua cosmogonía prehispánica. Espectáculos musicales, danzas de concheros y rituales simbólicos llenan las calles aledañas a la peña en estas fechas tan especiales para la localidad.

Toda persona que pasea por Bernal disfruta de largas caminatas por su centro para tomarse un helado en el jardín principal o comer algunas gorditas de maíz quebrado que distingue a la gastronomía de este Pueblo Mágico; sin embargo, el auge de este poblado para el turismo nacional e internacional ha abierto las opciones culinarias a restaurantes de alta cocina para satisfacer los gustos de toda clase de viajeros que lo visitan.

Al ser uno de los Pueblos Mágicos más visitados del país, la oferta hotelera ha crecido en número y en calidad, dando a los visitantes, no solo comodidad y estilo, sino vistas espectaculares a la Peña de Bernal.

Dignos de conocerse son los distintos museos que existen en esta localidad. El Museo del Dulce, que hace un recorrido por la historia de las confiterías en México; el Museo del Cine Nacional, que homenajea la trayectoria del cinefotógrafo de la época de oro del cine mexicano, Rosalío Solano; el Museo de la Máscara y su extraordinaria colección de máscaras elaboradas por gente de tanto del pueblo como del estado, pero también de otros lugares de la república y del mundo, son lugares que se deben conocer para completar una experiencia cultural en este poblado del municipio de Ezequiel Montes.

Para los aventureros, algunas agencias turísticas ofrecen la experiencia de escalar con expertos y equipo profesional hasta la cima de la Peña, pero también puedes encontrar tirolesas en los alrededores que combinan el senderismo con pequeñas dosis de adrenalina al cruzar estos circuitos de tirolinas.

Una simple caminata por Bernal bastará para que descubras la magia del pueblo y por qué se convertirá en un destino para regresar cada que sea posible.